LA VOZ DE LAS 36 HORAS: El teatro de los sueños

Cuando me pidieron que escribiera unas líneas acerca de lo que significaba este torneo, no pude reprimir el recordar los momentos, tanto buenos como malos, que han rodeado "mi modesta participación", en estas 36 Horas de Fútbol Sala. Todos y cada uno de ellos han dejado una marca indeleble en mi persona, y de ninguno de ellos podría pasar de largo sin recordarlos como algo muy especial.
Es muy difícil expresar en pocas palabras todos los sentimientos vividos durante estos años. En ellos se mezclan emociones que muy difícilmente pueden sentirse si no son en un torneo como el que tenemos la enorme suerte de poseer, porque si algo caracteriza a nuestras 36 Horas es que tiene la cualidad de ser propiedad no sólo de los deportistas sino, aún más importante, de los aficionados que año tras año llenan con su presencia el Pabellón Extremadura, y uno, que ya ha visitado más de un torneo, no deja de enorgullecerse ante el talante y la importancia del nuestro, sin lugar a discusión el más importante de los que se celebran en la provincia.
Ahora, cuando el deporte se ha convertido en un espectáculo en el que los medios de comunicación han fomentado la aparición de grandes cantidades de dinero, es muy importante que la gente tenga todavía el "buen gusto" de apreciar el deporte en su más digna modalidad, la del deportista que compite por algo tan esencial como su propio bienestar. Y es muy importante para la esencia de este torneo, que sigamos manteniendo ese nivel de aceptación en todos esos aficionados que se acercan durante el fin de semana a disfrutar del Fútbol Sala.
Ya falta poco para que se levante el telón, una vez más, y estamos ansiosos, cual actor antes de representar su papel en su estudiada obra, porque, para los verdaeros "inquilinos del teatro", las 36 Horas no dejan de ser nuestra Copa de Europa particular, y somos nosotros los que tenemos que realzar este "teatro" mejorando entre todos sus prestaciones e intentando dar siempre un paso más en cada edición.
Por eso os invito a pasar al "teatro", sentaos lo más cómodo posible, ya que os prometo emociones de alto calibre.Pero eso sí, no olvidéis que la parte más importante sois vosotros, que sin vuestra presencia todo esto no tiene sentido. Disfrutad y gracias por todo.

MIGUEL ANGEL RIVERA MURILLO
Actor secundario